Cuando hablamos del término obsolescencia programada u
obsolescencia planificada nos referimos a la vida útil del producto
proporcionada por la fábrica o empresa, cuando se excede esta vida útil, el
producto se volverá obsoleto e inútil. El objetivo es garantizar que los
consumidores compren el producto bastantes veces en lugar de una sola vez. Esto
naturalmente aumenta la demanda de productos porque los consumidores tienen que
regresar una y otra vez. El consumo social y la obsolescencia planificada son
la base del actual sistema social y económico. Sin embargo, el sistema no es
nuevo y el desarrollo comenzó en la década de 1920.
Con la aparición de la crisis del 29, la demanda de acortar la vida útil del producto estaba aumentando. En 1932, Bernard London narro por primera vez sobre la obsolescencia programada en su libro "Acabar con la depresión mediante la eliminación de planes". En el primer capítulo de su libro, London propuso públicamente hacer legal el plan y aplicarlo. En su libro recomendaba que la vida útil de todos los productos esté limitada por la fecha. Londres cree que, con esta tecnología, las fábricas seguirán produciendo, se necesitarán trabajadores y el desempleo terminará mientras se restablece el mercado.
- Cuando el producto deja de funcionar o falla algún elemento.
- Ausencia o costos elevados de repuestos que impidan la reparación
- Descatalogación del producto
- Incompatibilidad del producto con nuevas actualizaciones
- Continuos lanzamientos del producto con nuevas versiones o modelos más vistosos
- La caducidad del producto
- Existen también grandes problemas de esta práctica, de todos los que tiene los que destacan son:
- La importancia que se le da a lo económico por encima de la calidad, el desarrollo o la eficiencia del producto
- El exceso de residuos que se generan de los cuales una gran parte es biodegradable lo que esta llevando a un impacto desastroso al medio ambiente
- El uso excesivo de materias primas para producir en grandes masas
Hoy en día no existe ninguna normativa que lo solucione, pero en España lo regulada por el Real Decreto 110/2015, de 20 de febrero, sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos que, en su Artículo 6 habla sobre este tema.
Hoy en día podemos encontrar muchas alternativas a la obsolescencia programada de las cuales destacaría:
- Los diseñadores tienen que pensar en no solo usar materiales ecológicos, o en el proceso de eliminación de estos productos, sino que deben profundizar más en el significado del uso de estos productos.
- Cuando las fábricas crean productos nuevos con materiales biodegradables, dicho de otra forma, deberían crear soluciones positivas para el medio ambiente.
Es importante recordar que la obsolescencia no se puede evitar al 100% porque es un problema que viene de fábrica. Por otro lado, puedes combatirlo cambiando tu actitud y siguiendo varias pautas como pueden ser:
- Cuando su teléfono comience a tener problemas, debe averiguar la causa y optar por repararlo si es posible, en lugar de comprar un modelo nuevo rápidamente.
- Cambiar el objeto que ya está obsoleto por uno de segunda mano, cosa que no significa que también esté en mal estado. Así te ahorras algo de dinero.
- Son más difíciles de encontrar en el mercado actual, pero también existen productos fabricados por empresas que rechazan la obsolescencia programada. La Fundación Feniss (@FenissORG) ha impulsado la creación de un sello ISSOP (Innovación Sostenible Sin Obsolescencia Programada) que identifique aquellos productos libres de obsolescencia.
- Cuando tengas que tirar algún objeto, en vez de tirarlo a la basura, busca algún punto o empresa de reciclaje especializada que después fabrique nuevos productos con dichas piezas.
¿Tu crees que por culpa de la obsolescencia estamos creando una
sociedad consumista y derrochadora?
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